Iglesias Cristianas de Dios

 

[187]

 

 

 

Cómo Dios llegó a ser una Familia [187]

 

(Edición 1.0 19981204-19981204)

 

En el vacío nulo antes del comienzo del tiempo y el espacio hubo Uno. Él no entró en existencia - Él existía en sí mismo y, por consiguiente, Él era inmortal (Juan 5:26; 1Tim. 6:16). Él existió y Él era así un ser (o eso que existe). Los hebreos antiguos se refirieron a Él como Eloah y los caldeos como Elahh. Esta palabra se redujo a los árabes como Alá. Él era singular y solo (vea Deut. 32:15,17; Job (45 lugares); Esdras 4:24 a 7:26; Dan. 3:25; Prov. 30:4-5). Él Era. Este artículo examina el ser extendido que Dios crea.

 

 

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Cómo Dios llegó a ser una Familia [187]

 

 


 Dios como Creador

 

En el vacío nulo antes del comienzo del tiempo y el espacio hubo Uno. Él no entró en existencia - Él existía en sí mismo y, por consiguiente, Él era inmortal (Juan 5:26; 1Tim. 6:16). Él existió y Él era así un ser (o eso que existe). Los hebreos antiguos se refirieron a Él como Eloah y los caldeos como Elahh. Esta palabra se redujo a los árabes como Alá. Él era singular y solo (vea Deut. 32:15,17; Job (45 lugares); Esdras 4:24 a 7:26; Dan. 3:25; Prov. 30:4-5). Él Era. Este artículo examina el ser extendido que Dios crea.

 

Eloah era un espíritu (Juan 4:24). Él no actuó por antojo o impulso. Él simplemente pensó sobre lo que Él haría. En esta inmensa pre-eternidad, como puro espíritu, Él exploró el potencial de Sus acciones. Él no cambia (Santiago 1:17; Mal. 3:6) o experimenta. Él es así inmutable. Él pensó detenidamente en el espacio enorme de lo que estaba por delante. Este ser todo poderoso de puro espíritu examinó la estructura compleja e interconectada (o matriz) de todas las verdaderas proposiciones. Él examinó la causa y efecto de cada acción que Él tomaría y de todo lo que brotaría de Sus actos. Él pensó adelante al final del proceso entero de Sus acciones y la consecuencia de cada reacción. Como no había existencia física ni materia, todas estas acciones fueron conectadas por relaciones teóricas en la mente de Eloah. Así, causa y efecto (o la estructura de la causalidad) eran basados en relaciones teóricas (vea Creation: From a Man-made God to a God-made Man (Creación: De un Dios hecho por Hombre a un Hombre hecho por Dios) de Cox, 1996, Ca. 1)

 

Él entendió la magnitud llena de la naturaleza de todas las verdaderas proposiciones. Él conocía toda la verdad. Como Él era puro espíritu, este conocimiento estaba en Su ser como Verdad. Él era Verdad (Deut. 32:4). Él fue capaz de declarar el fin desde el principio. Él era entonces omnisciente (sabia todo) (Isaías 46:10; Salmo 147:5; Mateo 24:36; 1Timoteo 6:16).

 

Él supo lo que era posible lógicamente y supo cómo lo podía hacer. Él era omnipotente (todo poderoso) (Marcos 14:36; Lucas 1:37).

 

Él sabia lo que era bueno de la consecuencia de Su omnisciencia y Su naturaleza. Entonces, Él era bueno (Salmo 34:8). De la balance de bondad y verdad en Su esencia de ser, Él era justo (Esdras 9:15). De Su naturaleza, Él era justo y, entonces santo (Lev. 19:2). En este balance, Él era perfecto (Mateo 5:48).

 

Morando en perpetuidad, Él deseó extender Su modo de existencia y compartir ese modo de existencia con otros que serian como Él. Para abreviar, Él deseó una familia de seres como Él actuando como Uno. En este deseo, Él estableció de la base de Su naturaleza como ese ser extendido operaría. Esa naturaleza de interacción o sistema de operación fue puesta como Su ley. Su ley, que procedía de Su naturaleza, era entonces también justa (Salmo 119:172), perfecta (Salmo 19:7), santa (Rom. 7:12), buena (Rom. 7:12), verdad (Salmo 119:142). Él entonces determinó ser lo que Él sería. Este aspecto fue revelado mucho más tarde a los hebreos como ‘eyeh ‘asher ‘eyeh o Yo soy él que Soy (o seré o llegaré a ser; Vea Companion Bible, n. a Éxodo 3:14).

 

Él sabía que para que este producto de Su actividad fuera eternal o eterno tenia que ser como Él era. Tendrá que gobernarse el mismo como Él mismo era gobernado y tendrá que actuar recíprocamente dentro de las leyes que determinaban Su mismo ser.

 

La Generación de los Hijos de Dios

 

Él decidió producir Su familia de acuerdo a número y secuencia, desarrollando Su plan de esa secuencia predeterminada (Isaías 40:25-26; ref. Núm. 24:17; Salmo 147:4 re. estrellas). Dentro de ese plan tendría que haber libertad de actuar, en la fase de educación de Su familia y por su modo de existencia, de otro modo meramente hubiera creado un proceso mecánico y, entonces, robots y no una replica de Él mismo. La única cosa que no podría hacer es morir. Él tuvo la intención de darle esta capacidad a Su familia.

 

Él creó todas las cosas en acuerdo con una estructura representada por este número y secuencia. La secuencia del número fue basada en Uno, como la unidad que Él mismo era. Veremos que Él usó Su imagen como base de los individuos que formarían Su familia. Él creó Su familia en Su imagen – ambos la espiritual y más tarde las sub-familias físicas (2Cor. 4:4; Col. 1:15; Col. 3:10). Se harían dos lados de la misma estructura, ambas desarrollándose a la perfección final.

 

Llegaremos a ver más tarde de Su estructura de la creación física que la relación entera de la Familia de Dios fue basada en combinaciones de dos y cinco dentro el número completo de doce. Este numero se volvió la fundación del edificio espiritual entero de Su familia llamado la Ciudad de Dios (Apo. 21:12; vea el artículo La Ciudad de Dios [180]).

 

Él hizo una imagen de Él mismo simbolizada por el sistema numérico de cinco. Él produjo una super estructura espiritual de cinco, y con dos, Él determinó la estructura del Espíritu Santo. Este Espíritu vino a ser el poder por el cual obsequiaría a Su familia vida eterna y Sus capacidades. El Espíritu Santo fue compuesto del poder de los siete espíritus de Dios que están simbolizados estando ante Su trono en el Consejo. Así, Sus hijos hechos en Su imagen, después de haberles dado el Espíritu Santo basado en la subestructura de los siete espíritus de Dios (Apo. 1:4; 3:1; 4:5; 5:6), serían perfectos, basados en Su imagen y Su espíritu como siete y cinco. Él más tarde comisionaría este poder a la Hueste por medio del Mesías (Apo. 5:6). Entonces, doce fue el número sobre que crearía Su extensión o ser extendido. Este ser extendido sería en dos fases, lo espiritual y lo físico, uno siguiendo al otro pero basado en el mismo sistema. Esta estructura está delineada en las parábolas del Reino de Dios como el alimento a la multitud y también en el pan de proposición del Templo (Mateo 14:17-19; 15:34-36; 16:9-10; vea el artículo La Cena del Señor [103]). El sistema del cielo tendría ventajas y algunas diferencias. Por ejemplo, ellos serian asexuales y no tendrían interacción como varón y hembra y, entonces, no podrían reproducir verdaderos hijos de Dios de ellos mismos. Todos son llamados hijos de Dios y en la resurrección, la estructura se revertirá a asexualidad, como hijos de Dios (Mateo 22:30; Lucas 20:34-36). Es más, el concepto de este ser extendido o familia fue como uno compuesto actuando recíprocamente donde Dios es Un Dios y Padre de todos y sobre todos y en todos (Efe. 4:6).

 

Eloah propuso generar a Sus Hijos condicional a la obediencia y de aquí la forma que tomaron fue de dos partes de imagen y de extensión. Así que el Espíritu Santo fue el elemento condicional que los capacitó a desempeñarse como hijos de Dios bajo la voluntad de Dios. En esta manera, Su responsabilidad y guía continuada a la creación se podría ejercer. La desobediencia sería controlada por la remoción del Espíritu Santo de la imagen de base.

 

Eloah empezó a generar a Sus hijos, por numero y sucesión. El primer engendrado de uno a dos y como tres y entonces a siete. Basado en doce sistemas en cuatro divisiones, Él hizo veinticuatro. Este grupo numeraba treinta (Apo. 4:1 a 5:14). Ésta fue Su generación primaria. Él continuó adelante a setenta y después al sistema exterior hasta mil (Job 33:23).

 

Job 33:23 Si tuviese cerca de él Algún elocuente mediador escogido entre mil, que anuncie al hombre su deber; (RV)

 

De los mil, Él continuó generando hasta que la familia espiritual estuvo completa en su multitud. El sistema humano reproduciría esta estructura como una imagen exacta del tabernáculo y sistema celestial (Lucas 10:1,17; Hechos 1:15; Heb. 8:5). Su estructura se extendió más allá de los 144,000 (Apo. 7:1-17) hasta toda la creación (Apo. 20:11-15).

 

Estos hijos de Dios fueron los primeros hechos de Dios. De esta acción, Él se volvió el Padre de los Espíritus (Heb. 12:9). Él se volvió Dios como el Padre de la generación de los hijos de Dios. De este hecho, Él se puso múltiple y entonces elohim, que es plural. Antes del principio, había sólo Eloah. Los elohim fueron el principio o arche de la creación de Dios (Apo. 3:14). Él y los hijos eran elohim pero Él era haElohim o El Elohim. Él era el Único Dios Verdadero (Juan 17:3; 1Juan 5:20) o Eloah. La categoría de elohim es un producto de la voluntad de Eloah y un acto de Su poder. De esta acción, los hijos de Dios podrían decir que ellos tenían un Padre quien nos creó a todos (Mal. 2:10). A los hijos de Dios les fue dado el Espíritu Santo y se comunicaron a través de ese medio. Por medio del Espíritu Santo, ellos fueron unidos con Eloah o haElohim y como elohim. Él les reveló Su naturaleza y propósito a ellos, siendo el único Dios sabio e inmortal e invisible (1Tim. 1:17).

 

1Timoteo 1:17 Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amen.

 

Nota que la RSV basada en los textos anula la palabra sabio aquí en la base que el texto omite el término. Bullinger considera que entró subrepticiamente de Romanos 16:27.

 

Romanos 16:27 al único y sabio Dios, sea gloria mediante Jesucristo para siempre. Amen (RV)

 

Él fue él que se sentaba en el trono (Apo. 4:2).

 

Dios ungió dos de Sus hijos como querubines que cubren el Consejo de los Elohim - el prototokos o primer engendrado de esta creación (Col. 1:15) de los hijos de Dios (Salmo 45:6-7; Heb. 1:8-9) y Azazel, el ser que ahora conocemos como Satanás (Ezequiel 28:14-16).

 

Ezequiel 28:14-16 14 Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. 15 Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad. 16 A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector. (RV)

 

Estos seres eran perfectos en la suma de su sabiduría desde el momento de su generación. Desde esta generación de los hijos de Dios, la primera fase de la familia espiritual había sido establecida. Dios no había todavía revelado los aspectos enteros de la segunda fase. Él iba a ocultar eso en el misterio dentro de Él mismo, sólo revelando la magnitud entera a través de la familia física por fases. Así, la creación espiritual también tenía que caminar con fe (1Pedro 1:12). Desde la generación de los hijos, ellos existieron; entonces ellos fueron. Ellos se volvieron uno con Dios a través del poder del Espíritu Santo. Entonces, antes de que Abraham fuera, el Mesías es (Juan 8:58).

 

La modificación del Espíritu y la generación de los hijos iniciaron la relatividad. Como los hijos de Dios se movieron en relación de cada uno entre sí, las cosas empezaron a alterarse y, entonces hubo tiempo pasado - así, el tiempo empezó. Eloah fue supremo en esta secuencia. Él había asignado todas las cosas por propósito y tiempo. Así, Él era el Rey de los Siglos (1Tim. 1:17) y Dios de los Tiempos (ref. Eclesiastés 3:17; Isaías 9:6; Jeremías 10:10; vea el artículo El Gobierno de Dios [174]).

 

Él dio instrucción al prototokos o primer engendrado, el principio de la creación de Dios (Apo. 3:14). Este prototokos organizó a los hijos de Dios en las divisiones y administraciones y tronos y principados y poderes según la voluntad de Dios, pero Dios creó todas las cosas (Efesios 3:9; Col. 1:15; Apo. 4:11; note que las palabras por Jesús Cristo no están en los textos antiguos de Efe. 3:9 y fueron insertó en el Receptus, y, después, la KJV). Dios quien creó todas las cosas, escondió Su plan como un misterio.

 

Efesios 3:9 y de aclarar a todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas; (RV)

 

Los hijos eran hijos de Dios y estaban en relación sólo a Dios como Padre de los Espíritus en aquel tiempo. Así, no había ángeles (o mensajeros) en este momento en aquel tiempo. Esa función de espíritu mensajero y espíritu administrador vino mucho después. La voluntad de Dios fue comunicada a los hijos en el Espíritu Santo a través de la divulgación anuente del Padre de sí mismo.

 

Dios dio varias cosas antes del principio del tiempo como resultado de Su presciencia absoluta u omnisciencia. La cosa más importante fue la gracia. La gracia fue dada antes del principio del tiempo o tiempos eternos (2Tim. 1:9 chronõn aiõniõn o tiempos eternos, mal traducido como, antes de que el mundo comenzase en la KJV).

 

La gracia fue dada como un producto del Espíritu Santo a la imagen de Dios y entonces el número de la gracia es reconocido como cinco. Así, la gracia es un producto de la omnisciencia o la comprensión ilimitada del Padre (Salmo 147:5). La vida eterna es así también un producto de esta omnisciencia antes que el tiempo empezó (Tito 1:2; mal dado como edades pasadas, vea el texto principal de la Greek-English Interlinear (Interlinear Griego-Inglés) de Marshall). La vida eterna fue dada a los hijos como una función de su generación a través del Espíritu Santo y la construcción de su imagen en espíritu. Ellos poseen vida de la gracia de Dios. Así Eloah fue desde esta fase ambos Padre y Elohim, una familia con muchos hijos. Él era Eloah y haElohim. Él es así el Elyon o Dios Altísimo (Gén. 14:18; Núm. 24:16; Deut. 32:8; Marcos 5:7). Él es el Yahovah de los Ejércitos.

 

La Creación Física

 

Dios propuso la siguiente fase de la creación. Él pensó producir una creación física en la que el espíritu podría confinar y controlar la naturaleza de la existencia. Él hizo esto para que otra fase o medio de instrucción pudo ser dada a los hijos de Dios. De este medio ellos podrían aprender obediencia y fe en su Padre.

 

Dios empezó la creación física. Con el dedo de Su mente, Él ordenó al espíritu que empezará un proceso de ajuste para que un reino sólido pudiera crearse de eso que era invisible e inmaterial. Esto se logró de la manera siguiente. El espíritu inmaterial fue colocado en relación consigo mismo por rotación en velocidad y a través de fuerza. Este aspecto determinó la distancia entre la subestructura y entonces le dio propiedades variantes. Desde este orden de espíritu rotando, el sistema sub-atómico fue creado.

 

Este proceso inicial fue muy intenso y muy denso por la proximidad consigo mismo. Nosotros entendemos este proceso como el Golpe Grande (Big Bang) o el punto de origen del universo físico. Este origen del universo emanó de Dios como Su producto usando la relatividad de la creación espiritual que no se ve (Heb. 1-3). Las cosas que se ven son temporales. Las cosas que no se ven son eternas (2Cor. 4:18). Siglos más tarde, mentes endebles mirarían atrás y verían este proceso y determinarían a través de las matemáticas lo que ellos llamarían selección fase-espacio-volumen. Ellos sabrían que el origen del universo físico tenía que ser de un solo punto y ningún otro. Ellos determinarían numéricamente que esta fase-espacio-volumen fue 10 al poder 10 al poder 123. Este número fue tan grande, no podría apuntarse, de la manera normal, incluso poniendo ceros en todas las sub-partículas de materia en el universo. Esto demuestra meramente que sólo pudo confinarse a un lugar y solamente un lugar; a saber, el punto al que Dios escogió para originar el universo.

 

De esta actividad, Dios se volvió el creador y sostenedor de los cielos, la tierra y todas las cosas en ellos (Gén. 1:1; Neh. 9:6; Salmo 124:8; Isaías 40:26,28; 44:24; Hechos 14:15; 17:24-25; Apo. 14:7).

 

La fuerza espiritual usada para generar esta creación material se movía con tal poder y velocidad que empezó a expandirse el universo. Necesitó separar suficientemente lejos para que pudieran re-orientarse los átomos y las moléculas de variantes pesos y complejidades, así los sólidos, líquidos y gases llegaron a ser posibles. Cuando la materia se unió en concentraciones variantes, las galaxias fueron formadas. Dentro de las galaxias, la materia se reconcentró a una densidad suficiente tal, que se formaron sistemas y a masa crítica ellos se encendieron. Esta ignición fue de reacciones nucleares que liberaron el poder de la subestructura del espíritu dentro de secuencias controladas. En el principio físico, Dios creó los cielos y la tierra (Gén. 1:1).

 

Los hijos de Dios fueron divididos en sistemas administrativos. El universo fue dividido en cuatro sectores (o cuadrantes). Estos se pusieron bajo un ser representado como una criatura viviente. Cada uno de los sectores fue de tres sistemas; con dos del Consejo para un sistema. De esta manera, había veinte cuatro ancianos en el Consejo con las cuatro criaturas vivientes y el primogénito o prototokos. En esta época, la rebelión no había ocurrido y Azazel era el segundo ungido.

 

El propósito de la creación física se desplegó como un misterio. Los hijos de Dios tuvieron que proceder por la fe. La capacidad de creación se permitió a los hijos de Dios como parte del Consejo de los Elohim (Gén. 1:26). Se congregaron los hijos de Dios y cantaron de alegría a la creación de este planeta por Eloah. Los sistemas se habían puesto bajo las Estrellas de la Mañana como líderes.

 

Job 38:4-7 4 ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia. 5 ¿Quién ordenó sus medidas, si lo sabes? ¿O quién extendió sobre ella cordel? 6 ¿Sobre qué están fundadas sus bases? ¿O quién puso su piedra angular, 7 Cuando alababan todas las estrellas del alba, Y se regocijaban todos los hijos de Dios. (RV)

 

El universo entero se había puesto bajo un sistema de gobierno y orden que nosotros vemos reflejado después en el Tabernáculo de los hebreos (Heb. 8:5). Azazel fue hecho Estrella de la Mañana o el Portador de Luz de este planeta (Isaías 14:12) y Él fue hecho elohim de este planeta (2Cor. 4:4). El Mesías es la Estrella de la Mañana o la Estrella del Día, designado para reemplazarlo (Núm. 24:17; 2Pedro 1:19; Apo. 2:28; 22:16).

 

Este planeta se pobló con seres creados no basados en nuestro sistema mamífero. La Estrella de la Mañana encargada de este planeta produjo un sistema de vida basado en un sistema reptil que parezca haber tenido algunas aptitudes notables. La vida inteligente, como nosotros la conocemos, es pensada por la ciencia moderna de ser posible sólo dentro de más o menos dos millones de años de la vida de los sistemas de las estrellas principales. Nosotros vemos de nuestra excavación del pasado que los humanoides comenzaron a aparecer recientemente en este planeta en la vida del sistema. Lo que nosotros clasificaríamos como humanoides, a distinción de primates como humanos, es muy reciente. 100.000 años atrás, los Neandertales aparecieron y ellos fueron reemplazados hace 40.000 años con otro sistema parecido al nuestro.

 

En alguna fase en esta estructura, Dios reveló en parte a Sus hijos lo que el propósito de la creación física sería. El misterio entero se detuvo de ellos y sólo se reveló mucho más tarde a través de la Iglesia (1Pedro 1:12). Algunos de estos seres no ejercieron fe en el Padre y ellos se rebelaron. Azazel tomó uno tercio de la Hueste en esta rebelión. Por lo menos hasta el tiempo de Job, todos los hijos de Dios tenían acceso al trono de Dios, y Satanás estaba entre ellos (Job 1:6; 2:1).

 

La naturaleza exacta de la rebelión parece haber involucrado una devastación de este planeta y probablemente es el intento del pasaje en Génesis 1:1-2. El planeta tuvo que ser restaurado y un hombre creado lo cual podría desplegar la próxima secuencia del plan de Dios. Ésta fue la creación Adámica. Este hombre tuvo la imagen de Dios para que el Espíritu pudiera dársele. Los hijos de Dios durante esta fase entera no eran, ni podían, ser clasificados como ángeles. La categoría no comenzó hasta después de la creación de Adán, porque hasta ese tiempo, no había necesidad para tal categoría de ser; a saber, un mensajero. Pues hasta que existió un destinatario de un mensaje no podría haber ningún mensajero.

 

Con la creación del sistema de Adán, la rebelión y el pecado vinieron. Azazel pecó en su actitud y los hijos de Dios pecaron en su relación con los humanos.

 

Durante esta fase de la caída, ocurrió la creación de los Nefilim o los Refaim (vea el artículo Los Nefilim [154]). Los hijos de Dios pecaron en esto y en el proceso subsecuente (Judas 6).

 

La creación de los Neandertales, los Cro-Magnons y los Refaim o Nefilim involucraron un periodo de 100.000 años. Ninguna resurrección se otorga a los Neandertales, los Cro-Magnons, los Refaim o los Nefilim (Isaías 26:13-14; vea el artículo La Resurrección de los Muertos [143] y también Los Nefilim [154]).

 

En alguna fase en este proceso, una destrucción del planeta tomó lugar. La creación de Génesis 1:1 se volvió tohu y bohu o sin forma y nulo. El texto en Génesis 1 habla también de las generaciones de los cielos y la tierra. Cada generación es representada por un día, como nosotros vemos de la narrativa. Aun es simplemente llamada una generación (heb. toledâh DHS 8435 de DHS 3205) en el plural lo que significa un descendiente o familia, por ende, una historia y así un nacimiento o generaciones. Esta palabra es bastante diferente de DHS 1755 (dôr) que normalmente es la palabra usada para generaciones que significan una revolución de tiempo. Así el concepto es hecho de una historia de descendientes como también en una familia.

 

La historia de Génesis dice claramente que las plantas se hicieron en el sexto día después de todas las criaturas vivientes. Sabemos sin duda del registro de los fósiles que la cuenta aquí no esté de acuerdo con el desarrollo del planeta sobre los millones de años de su historia de vida. Esta cuenta puede ser sólo una de la regeneración del planeta. Esta cuenta es la recreación que está referida en Juan 1:10 y que fue emprendida por el Logos o prototokos. Esto podría ser sólo consecuente en una destrucción. Es más, este ser se le apareció a Adán y Eva. Nosotros sabemos que Juan 1:18 dice que Ningún hombre ha visto a Dios jamás. El único Dios nacido (monogenes theos), ese único ser en el seno del Padre, habló (vea la Greek-English Interlinear RSV (Interlinear Griego-Inglés) de Marshall).

 

Génesis 6:2 afirma que los hijos de Dios engendraron con las hijas de los hombres.

 

Génesis 6:2 que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. (RV)

 

La New Oxford Annotated Bible RSV (Nueva Biblia Anotada RSV de Oxford) dice en la nota a este versículo que 2: "Los hijos de Dios eran seres divinos que pertenecieron a la corte celestial (1.26 n.). 3: a pesar de la intrusión lujuriosa de seres divinos en la esfera humana, el hombre no se volvió semi-divino (compare 3.22-24) sino continuó siendo una criatura mortal en quien el espíritu del Señor mora temporalmente (vea 2.7 n.)." Así, los Nefilim no podrían lograr la resurrección y el Espíritu Santo.

 

Los Trinitarios insisten que Juan 1:10 se refiere a la creación original y, porque está en conflicto con Apocalipsis 4:11 y Efesios 3:9 (RSV), ellos aleguen entonces que la Trinidad se establece como un hecho. Lo ilógico de esta posición los ha puesto entonces en desigualdades con el registro histórico. Están luego confrontado con admitir la teoría de la evolución por el conflicto. La Iglesia Católica adoptó la teoría de la evolución formalmente en 1996 en lugar de dejar la doctrina falsa de la Trinidad.

 

Señales en los Cielos

 

En Génesis 1:14, se registra que Dios estableció las luces en los cielos para el día y la noche, para las señales y para las estaciones, y para los días y los años. El movimiento de los cielos es precisamente predecible por conjunción con relación a sí mismo. Cada una de estas actividades es exacta, incluso la conjunción de la Luna Nueva y la duración de los días, las estaciones y los años. El año se diseña en la fase de doce meses si solar o lunar, con un año intercalado siete veces en diecinueve años. La fase de movimiento del sol a través de los cielos también está en doce fases o casas y esta duración del año como fija en los cielos puede verse para marcar el plan de las actividades de Dios como una señal de Su creación. La duración del año lunar-solar, tal como determinado del equinoccio vernal del Norte en marzo cada año, también está en relación de siete a cinco. Las sagradas fases del calendario son de Nisan a Tishri - del primero al séptimo mes. De esta manera, la misma relación entre hombre, siendo hecho en la imagen de Dios, y hombre, como un hijo de Dios a través del Espíritu Santo, se demuestra. Así, la misma relación existe para los hijos terrestres de Dios desde su adopción como también para los hijos celestiales de Dios desde su generación. El calendario antiguo que empieza en Tishri es realmente basado en el espíritu del hombre. El calendario nuevo a partir de Nisan empieza el Espíritu Santo en el hombre a través de la Pascua que es Mesías. La Fiesta de los Panes sin Levadura representa la salvación y el Pentecostés representa la iglesia. El séptimo mes (Tishri) representa la intervención en el planeta y la redención de toda la humanidad durante el sistema milenario hasta el Último Gran Día. Calculando el año desde la Molad de Tishri niega el Mesías y el recibimiento del Espíritu Santo en este proceso.

 

Dios creó al hombre con responsabilidad por el planeta (Gén. 1:26; 2:15). De la misma manera, Él les dio responsabilidad a los hijos celestiales de Dios por el universo y por el bienestar del hombre. Con la creación del hombre, Dios estableció el papel de los hijos de Dios como mensajeros y no antes. El ser a quien fue dada la responsabilidad por Adán fue Yahovah Elohim. Este ser era el prototokos o logos de Dios. Ese era el elohim que los patriarcas vieron y con quien ellos hablaron. Este ser era el Ángel de Redención y el Ángel de Yahovah o la Presencia de Dios (Gén. 48:15-16; Zac. 12:8; Hechos 7:30-32). Los hijos de Dios se volvieron espíritus ministradores para la humanidad para que ellos pudieran obtener salvación (Heb. 1:14).

 

Dios asignó las naciones del sistema post-diluvio a los setenta hijos de Dios del Consejo externo. Israel fue dado al logos (o primogénito como el delegado de Yahovah de los Ejércitos) por su responsabilidad, el cual tuvo que ser extraído de otras naciones.

 

Deuteronomio 32:8-9 8 Cuando el Altísimo hizo heredar a las naciones, Cuando hizo dividir a los hijos de los hombres, Estableció los límites de los pueblos Según el número de los hijos de Israel (de Dios). 9 Porque la porción de Jehová es su pueblo; Jacob la heredad que le tocó. (RV)

 

Después de la muerte de Cristo, este texto se alteró en el TM por los rabinos para leer según los hijos de Israel y eso se sigue en la RV. Nosotros sabemos con toda seguridad que la LXX y los Rollos del Mar Muerto (RMM) muestran que este significado en la RSV es lo antiguo y correcto. El rabino Akiba declaró que la LXX era incorrecta a partir de 130 EC. Sin embargo, el texto es correcto y las naciones se repartieron según los hijos de Dios. El término Señor, aquí, es Yahovah que también fue alterado por los Sopherim para ocultar las identidades de los seres involucrados. Yahovah es el subordinado de Yahovah de los Ejércitos que lo envío. Yahovah de los Ejércitos lo ungió como elohim sobre sus compañeros (Salmo 45:6-7; Hebreos 1:8-9). Israel fue dado a él porque esa nación sería el medio por el cual todo el Ejercito y todos los de la creación se reconciliarían como una familia a Dios sobre el periodo de la creación física. Dios quiso un espíritu de servicio y sacrificio de sí evidente entre Sus hijos y, como tal, Él declaró que el líder del sistema debería poder demostrar ese sacrificio. Por esto el Mesías estuvo designado en el libro de la vida, como fueron todos los elegidos antes de la fundación de este planeta (Apo. 13:8).

 

Apocalipsis 13:8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo. (RV)

 

De este texto, nosotros vemos la entrega correcta. Nosotros fuimos todos escritos en el libro de la vida antes de la fundación del mundo. No sólo fue Cristo dedicado para ser matado sino nosotros fuimos declarados salvos por gracia desde ese tiempo. Cristo tenía que desplegar una actitud que fue crítica a su nombramiento como Sumo Sacerdote. Satanás se había rebelado. Lo que Dios quería era obediencia. Cristo se despojó a sí mismo y tomó forma humana para que todos nosotros pudiéramos ser salvos.

 

Filipenses 2:5-11 5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, 6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. (RV)

 

Dios concedió en el Mesías Su nombre que está por sobre cualquier otro nombre. El Mesías toma los títulos de honor por delegación de Dios el Padre. Él se hizo Yahovah Elohim y Sumo Sacerdote. Él se volvió un Padre eterno de nuestra paternidad o patria para que nosotros pudiéramos doblarnos ante Dios el Padre de quien toma su nombre cada familia o paternidad en el cielo y la tierra (Isaías 9:6 (el Ángel del Gran Consejo LXX); Efesios 3:14-15). Cristo obtuvo un ministerio más excelente (Hebreos 8:6). Ofreciéndose, él se volvió el mediador del nuevo pacto porque él purificó las cosas celestiales y no sólo las cosas terrestres. Por su sacrificio, él santificó a la Hueste celestial y a la Hueste humana terrestre. Él quien santifica y ellos quienes son santificados son de un mismo origen (Heb. 2:11 RSV). Él tenía que asumir una forma humana para que nosotros también pudiéramos ser santificados por sus acciones. Cristo vino para hacer la voluntad del Padre y sólo después de que él hubo hecho esto y ofrecido un sacrificio para siempre por los pecados, fue puesto a la mano derecha de Dios (Heb. 10:5-9,12). Cristo soportó la cruz por el gozo que fue puesto delante de él y por esta razón está puesto en la mano derecha de Dios (Heb. 12:2). (Ver el artículo La Preexistencia de Jesucristo [243]).

 

Dios es el Padre de los Espíritus quien nos castiga para nuestra ganancia. Así, los espíritus son Sus hijos, como todos nosotros somos Sus hijos. Cristo se volvió un hijo de Dios en poder por su resurrección de entre los muertos (Rom. 1:4).

 

Romanos 1:4 que fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos, (RV)

 

Él fue designado como hijo de Dios en poder según el Espíritu Santo por su resurrección de entre los muertos. Cristo no poseía esta posición intrínsecamente y él no tuvo el estado lleno de su posición pre-encarnada aunque estaba en un estado glorificado como él dice (Juan 17:1-5). La Biblia no se contradice sin hacer la contradicción necesaria para la comprensión correcta de la naturaleza del problema. Cristo no era inmortal en sí mismo. Sólo Dios es inmortal de, y por sí mismo (1Tim. 6:16). A Cristo le fue dado tener vida en sí mismo, como el Padre tiene vida en sí mismo (Juan 5:24-26).

 

Juan 5:24-26 24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. 25 De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán. 26 Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo; (RV)

 

El Mesías dijo que el Padre tenia vida en sí mismo y Él ha dado al hijo el tener vida en sí mismo. Él también dijo que Ningún hombre ha oído la voz de Dios o ha visto Su forma en cualquier momento (Juan 5:37).

 

Juan 5:37 También el Padre que me envió ha dado testimonio de mí. Nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su aspecto; (RV)

 

El Espíritu Santo es el mecanismo por el cual los elegidos son hijos de Dios. Nosotros recibimos el pago anticipado en nuestro bautismo y la redención o la asignación completa en la adopción que es la redención de nuestros cuerpos.

 

Romanos 8:11-17 11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. 12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne; 13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. 15 Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! 16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. 17 Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. (RV)

 

Romanos 8:22-23 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora; 23 y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. (RV)

 

Nosotros también somos destinados a ser coherederos con él, como hijos de Dios por nuestra resurrección de entre los muertos. Nosotros fuimos predestinados para recibir la adopción como hijos (Efesios 1:5, Gálatas 4:5) desde antes de la fundación del mundo. Nosotros somos destinados a ser hijos de Dios en poder después de la resurrección. Nosotros nos uniremos con la Hueste angélica, como hijos de Dios, bajo el Sumo Sacerdocio de Melquisedec, lo cual es investido en el Mesías (Hebreos 5:6,10; 6:20; 7:1-21).

 

La unión final de la creación entera ocurre al final de la segunda (o general) resurrección de los muertos, cuando la Ciudad de Dios es traída abajo y todos se ponen bajo Dios el Padre para que Él pueda ser todo en todos (Efesios 4:6) (vea el artículo La Ciudad de Dios [180]). Ellos de la Hueste angélica son nuestros hermanos (Apo. 6:11; 12:10). Ellos son nuestros hermanos porque ellos también son hijos de Dios, como nosotros somos desde la primera resurrección (vea Apo. 20:1-6). El texto en 1Corintios 6:2-4 se refiere a juzgar a los Ángeles caídos y esto ha causado a menudo mal entendimiento. Los ángeles también son los elegidos (1Tim. 5:21).

 

El Espíritu Santo es el mecanismo por el cual toda esta unión penetrante de la creación con Dios pueda ocurrir, para que todos sean Sus hijos y que todos sean de un mismo origen bajo un Dios y Padre (vea los artículos El Espíritu Santo [117] y Consubstancial con el Padre [081]). Sus hijos son elegidos según Su Presciencia (1Pedro 1:2). Por esto ellos son predestinados, escogidos, llamados, justificados y glorificados (Rom. 8:29-30).

 

La estructura trinitaria golpea al corazón de la comprensión del plan de Dios e impide a sus adheridos entender el proceso de cómo la creación entera puede volverse hijos de Dios y coherederos con Cristo. El falso o pseudo-Cristiano virtuoso que atribuye a Cristo como hijo de Dios en distinción de la Hueste es llevado de ignorancia y filosofía del neo-platónico. Dios permite esta confusión porque Él no está tratando todavía con todo el mundo. Todavía está bajo el liderazgo de Satanás que es el dios de este mundo y a quien ha sido dado un lapso de tiempo para que su sistema pudriera agotarse a sí mismo. El sistema de Satanás destruirá este planeta. Dios intervendrá enviando al Mesías a tomar el planeta, cuando casi se destruya, por causa de los elegidos que son Israel espiritual y físico (Isaías 42:1; 45:4; Mateo 24:22). De esa manera, nosotros, como hijos pequeños, veremos que el sistema de nuestro Padre bajo Su ley es correcto. Dios desea obediencia pero está revelando Su plan sólo a unos en el presente. Su sistema entero está allí para que todos vean pero pocos entiendan, porque ellos son engañados deliberadamente por sus maestros.

 

Dios se volvió una familia a partir de la generación de la Hueste en el primer caso. Él no completó este acto de Paternidad y no lo completará hasta la fase final después del juicio y la conversión del planeta. Todos en el planeta serán entonces hijos de Dios, como elohim, bajo la voluntad de Dios actuando en el Espíritu Santo como un organismo cohesivo que nosotros llamamos la familia de Dios.

 

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