Iglesias Cristianas de Dios

 

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La Relación Entre la Salvación por Gracia y la Ley [082]

 

(Edición 2.0 19941217-20000408)

 

 

Este es el primero de una serie sobre el tema de la Gracia y de la Ley. El artículo comienza con la posición bíblica de Dios como la fuente de salvación. Se trata sobre la posición de la ley con relación a la salvación por la gracia. Se discute las obligaciones conforme a la ley y se explica por qué los Cristianos guardan la ley.

 

 

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La Relación Entre la Salvación por Gracia y la Ley [082]

 


 

La gracia no hizo que la ley perezca. La ley no perece: hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota ni un tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas (Mateo 5:17-18). Esto no significa que parte de ella perecerá. Significa que ni una coma, o ni un punto perecerá de la ley hasta que este planeta sea destruido. Esto va directamente a través de todo el Milenio y por todo el juicio. Cuando él venga, Cristo insistirá que la ley sea puesta en práctica con la punta de una espada y él matará a la gente que no pone en aplicación la ley. No hay nada débil en nuestro maestro. Cuando esto es reinstaurado y reinstalado bajo Jesucristo, si no guarda la ley, usted estará muerto.

 

La gente morirá lentamente de hambre o debido a plagas si no guardan la ley. Si piensa que es impío, entonces debería leer el texto en Zacarías 14:16 y lo que sigue, donde se declara que si no se guarda la Fiesta de los Tabernáculos, no se conseguirá nada de lluvia en la temporada prevista. El proceso entero será uno de sequía del planeta de modo que la nación que no guarde la fiesta morirá de hambre hasta que se arrodille y diga “Señor danos un poco de lluvia; enviaremos a nuestros representantes a Jerusalén”. Si Cristo va a hacer esto en el Milenio, él no va a perdonar el no guardar la ley mientras se está esperando por él y por la restauración. Si él lo estableció bajo Moisés, él va a restaurarlo en el Milenio. El interregno es obviamente un punto en el cual somos probados en la ley.

 

El argumento que la gracia ha eliminado la exigencia de guardar la ley es muy antiguo. Surgió bajo el Protestantismo y encontró su nivel máximo en el anti-nomianismo tanto en las primeras iglesias como en las iglesias post-reformación. Está basado en una serie de afirmaciones falsas y distorsión de la Escritura. Las Iglesias de Dios generalmente tienen poco dificultad en ocuparse de este error. Esto por lo general acompaña al Trinitarianismo y es acompañado por la misma deformación intelectual que permite a las doctrinas Trinitarias que se establezcan. Los errores están basados en el mal uso selectivo de las Escrituras, y se ve que los argumentos son falsos cuando la variedad completa de las Escrituras es colocada en contexto con cada una.

 

El punto de inicio es el concepto de Dios como fuente de salvación. Él es nuestro refugio y el punto de origen del proceso, que Él inició a través de Jesucristo, el único Hijo nacido de Dios. Este es el primer paso donde ellos dicen que Cristo es la fuente de salvación, y no Dios. Ellos intentan y deforman el concepto de salvación. Dios es nuestra roca, nuestra fuerza y nuestra salvación. Esa es la función de Dios. La salvación llegó a través de Jesucristo bajo la dirección de Dios. La primera base de la Trinidad es el  elevar a Cristo hacia Dios y hacer que Cristo sea objeto de adoración y objeto de salvación. Esto suprime a Dios.

 

Dios es nuestra roca, nuestra fuerza y nuestra salvación, en quien nos refugiamos.

 

Salmo 18:1-2 Al músico principal. Salmo de David, siervo de Jehová, el cual dirigió a Jehová las palabras de este cántico el día que lo libró Jehová de manos de todos sus enemigos, y de manos de Saúl. Entonces dijo: Te amo, Jehová, fortaleza mía. Jehová, roca mía y castillo mío, mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio. (RV)

 

Tanto la ley como la salvación provienen de Dios por Jesucristo. Cristo ordenó la ley en el Sinaí como el Ángel del Señor y él murió como el instrumento, el sacrificio y el objeto de la salvación.

 

Confiamos en Él y no tenemos miedo (Isaías12:2). La confianza en el Señor aleja el miedo.

 

Isaías12:2  He aquí, Dios es mi salvación; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es Jah Jehová, quien ha sido salvación para mí (RV)

 

El conocimiento de la salvación es una misión de Cristo y de los profetas (Lucas 1:77). Juan fue ante el Señor.

 

Lucas 1:77 para dar conocimiento de salvación a su pueblo, para perdón de sus pecados (RV)

 

Este conocimiento es ampliado hacia la Iglesia donde los santos son los administradores de los misterios de Dios.

 

1Corintios 4:1 Por tanto, que los hombres nos consideren como servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios. (RV)

 

La salvación viene de los judíos

 

Juan 4:22 Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos: porque la salvación viene de los judíos. (RV)

 

pero fue extendida en Cristo a aquellos que adoran a Dios en espíritu y en verdad.

 

Juan 4:23-24  Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque también el Padre tales adoradores busca que lo adoren. Dios es Espíritu, y los que lo adoran, en espíritu y en verdad es necesario que lo adoren

 

No existe salvación en ningún nombre debajo el cielo a parte de Cristo dado a los hombres para que podamos ser salvos.

 

Hechos 4:12 Y en ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. (RV)

 

Así, la salvación fue otorgada por el evangelio, siendo el poder de Dios para la salvación de todos los que tienen fe, viniendo primero a los judíos y luego a los Gentiles. En el evangelio, la justicia de Dios se revela por la fe para la fe, porque aquel que por la fe es justo vivirá.

 

Romanos 1:14-17 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor. Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma. No me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación de todo aquel que cree, del judío primeramente y también del griego,  pues en el evangelio, la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá (RV)

 

Dios no destinó a la humanidad para la ira, si no para obtener la salvación a través de Jesucristo.

 

1Tesalonicenses 5:9  Dios no nos ha puesto para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo; (RV)

 

Entonces, Dios no trata con nosotros de un modo difícil para destruirnos. Él trata con nosotros a fin de llevarnos a la salvación en Jesucristo. A fin de cumplir con esto, tiene que haber un proceso.

 

El entendimiento de Dios produce una tristeza piadosa, que produce arrepentimiento, que conduce hacia la salvación.

 

2Corintios 7:10 La tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de lo cual no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte. (RV)

 

Así, el evangelio es la palabra de la verdad y por lo tanto es el evangelio de la salvación, teniendo como resultado en el sello del arrepentido con el Espíritu Santo.

 

Efesios 1:13 En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa (RV)

 

La salvación se obtiene de las escrituras sagradas o de la Escritura. Siendo inspirada por Dios, las Escrituras pueden instruir a la persona arrepentida para llegar a la salvación por la fe en Jesucristo.

 

2 Timoteo 3:15-16 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia (RV)

 

Aunque él fuera un Hijo, él aprendió la obediencia por lo que él sufrió. Siendo hecho perfecto, él se convirtió en la fuente de salvación eterna para todos los que le obedecen.

 

Hebreos 5:8-9 Y, aunque era Hijo, a través del sufrimiento aprendió lo que es la obediencia; y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que lo obedecen. (RV)

 

Así, él fue ofrecido una vez para tratar con el pecado y aparecerá una segunda vez, no para tratar con el pecado, si no para salvar a aquellos que con impaciencia lo esperan.

 

Hebreos 9:28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que lo esperan. (RV)

 

La salvación es, por lo tanto, común para todos y fue entregada a los santos de una vez y para siempre.

 

Judas 1:3  Amados, por el gran deseo que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros para exhortaros a que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos. (RV)

 

De tal modo, no existe otra revelación después de aquella que le fuese entregada a Jesucristo por Dios y luego entregada a Juan. Todo lo que es necesario para la salvación de la humanidad está dentro de la Biblia. La salvación y el poder y la gloria pertenecen a Dios y Él lo ha revelado a Sus siervos a través de Cristo y no debe ser cambiado.

 

Apocalipsis 22:18-19 Yo advierto a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añade a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. Y si alguno quita de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro. (RV)

 

El sello final de los santos es, así, a través del Espíritu Santo, siendo basado en la ley de Dios como se reveló en la Biblia en el Antiguo Testamento empezando por la revelación de la ley.

 

Cristo dio la ley en el Sinaí como el Ángel del Pacto o Presencia – el Ángel de Yahovah. Él dijo que:

 

.....que hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas. De manera que cualquiera que infringiere uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñare a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos: mas cualquiera que hiciere y enseñare, éste será llamado grande en el reino de los cielos. (Mateo 5:18-19) (RV)

 

Por esto, Cristo de ninguna manera disminuyó la ley. Él guardó la ley y mandó que la gente lo hiciera de la misma forma. La ley y los profetas fueron hasta Juan. De Juan en adelante, las noticias buenas del Reino de Dios se predican, y cada uno entra en él violentamente (o es presionado a entrar en él).

 

Lucas 16:16-17 Pero más fácil es que pasen el cielo y la tierra, que se frustre una tilde de la Ley.  (RV)

 

La ley fue entregada a través de Moisés, y aún no la guardaron.

 

Juan 7:19 ¿No os dio Moisés la Ley? Sin embargo, ninguno de vosotros la cumple. ¿Por qué intentáis matarme? (RV)

 

Ellos buscaron matarle porque la mente carnal está en enemistad con Dios, ya que no está sujeta a la ley (Romanos 8:7) y así busca eliminar a aquellos que guardan la ley, siendo condenados por su obediencia.

 

Aquellos que pecan sin la ley, perecerán sin la ley. Aquellos que pecan bajo la ley, perecerán conforme a la ley.

 

Romanos 2:12 Todos los que sin la Ley han pecado, sin la Ley también perecerán; y todos los que bajo la Ley han pecado, por la Ley serán juzgados. (RV)

 

El pecado es la anarquía o la transgresión de la ley (1Juan 3:4). El castigo del pecado es la muerte, ya sea si es cometido en administraciones bajo la ley o fuera de la ley. Es irrelevante si la administración decreta leyes diferentes. Aquellos que pecan mueren a menos que ellos sean restaurados a una nueva vida en la salvación de Cristo. Luego ellos guardan la ley.

 

La circuncisión es de corazón y la observancia de los principios de la ley es la medida de la circuncisión. Él que guarda la ley es circuncidado de corazón, mientras él que es circuncidado y no guarda la ley es como si él fuese un infiel. Los que son judíos son aquellos que guardan la ley de corazón siendo judíos hacia adentro. Mientras aquellos que dicen que son judíos y no lo son heredan la condenación (Apo. 3:9) y ellos se obligarán a postrarse ante los santos. (Esta postración también se traduce como adoración y se aplica a Cristo y a los elegidos).

 

Apocalipsis 3::9 De la sinagoga de Satanás, de los que dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten, te daré algunos. Yo haré que vengan y se postren a tus pies reconociendo que yo te he amado. (RV)

 

El argumento Protestante de la gracia que elimina la ley está basado en la declaración que los elegidos están muertos a la ley, sacado del texto en Romanos 7:4. El Anti-nomianismo une esta distorsión con el mal uso de la doctrina de la predestinación.

 

Romanos 7:4 Así también vosotros, hermanos míos, estáis muertos a la ley por el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, a saber, del que resucitó de los muertos, a fin de que fructifiquemos a Dios. (RV)

 

Esta estructura no elimina la ley, si no que enfatiza el poder del Espíritu Santo regulando al individuo por la naturaleza de Dios que proviene de Dios por el Espíritu Santo. La distinción está hecha entre vivir en la carne y tratar de regular la relación de uno con Dios por reglas hechas para interpretar la ley, que es de por sí santa, justa y buena. La ley no es algo físico. Aquellos que viven en la carne la tratan como si fuera una cosa física. Estamos muertos a ese aspecto, porque ya no vivimos en la carne. El Mesías introducirá nuevamente la ley en su totalidad en el Milenio según la Escritura, y la Escritura no puede ser quebrantada. Entonces, ¿cómo es que se suprime la ley como una realidad?  La ley no da la vida, el Espíritu Santo la da a través de Cristo.

 

Romanos 7:5-7 Mientras vivíamos en la carne, las pasiones pecaminosas, estimuladas por la Ley, obraban en nuestros miembros llevando fruto para muerte. Pero ahora estamos libres de la Ley, por haber muerto para aquella a la que estábamos sujetos, de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra ¿Qué, pues, diremos? ¿La Ley es pecado? ¡De ninguna manera! Pero yo no conocí el pecado sino por la Ley; y tampoco conocería la codicia, si la Ley no dijera: No codiciarás. (RV)

 

 

Sin el Espíritu Santo, las lujurias de la carne se despiertan por el conocimiento del bien y del mal, que está contenido dentro de la ley.  Sin la naturaleza de Dios, no se puede guardar la ley en santa justicia. Así, estamos libres de la ley en de Jesucristo. Esto no significa que estamos liberados y nos da licencia de hacer cualquier cosa. Si amamos a Dios, guardamos Sus mandamientos.

 

Juan 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos; (RV)

 

No hay ninguna contradicción en estos textos. Los mandamientos provienen del Padre y son guardados por Cristo.

 

Juan 15:10 Si guardareis mis mandamientos, estaréis en mi amor; Como yo también he guardado los mandamientos de mi Padre, y estoy en su amor. (RV)

 

Entonces¿ Qué fue clavado en la cruz?

 

Colosenses 2:13-15 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados. Él anuló el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, y la quitó de en medio clavándola en la cruz. Y despojó a los principados y a las autoridades y los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz. (RV)

 

El Colosenses 2:14 es traducido en el texto principal por Marshall como:

 

¦>"8,\R"H JÎ 6"2z º:ä< P,4D`(D"N@< J@ÃH *`(:"F4< Ô µ<

 

exaleipsas to kathi emõn cheirographon tois dogmasin ho en

 

borrando lo que estaba en contra de nosotros escrito a mano en ordenanzas que eran

 

ßB,<"<J\@< º:Ã<s 6"4 "ÛJÎ µD6,< ¦6 J@Ø :XF@Ls BD@F08fF"H

 

upenantion emin, kai auto erken ek tou mesou, proselõsas

 

en oposición a nosotros y ha removido del medio (camino), clavando

 

"ÛJÎ Jè FJ"LDèq

 

auto tõ staurõ

 

lo a la cruz [estaca (staurõ)].

 

Así, el recibo de la cuenta o de las deudas (cheirographon) contraídas de las ordenanzas de la ley ceremonial era lo que se clavó a la estaca. Así, la purificación ritual por el ofrecimiento fue eliminada o quitada del camino de una vez y para siempre por Cristo. Esta herejía en Colosas será examinada detalladamente en un artículo posterior. Los Días Santos y los Sábados no son parte de las ordenanzas de la ley ceremonial. Sólo las leyes de sacrificio son eliminadas. Por su sacrificio, Cristo, de una vez y para siempre desarmó los principados y los poderes. El texto en griego dice archas que se tradujo gobernantes y las autoridades (ezousias). Él los puso al descubierto con franqueza, y triunfó sobre ellos en ello. Así, Cristo puso al descubierto los poderes divinos (y principalmente a Satanás) quiénes no se darían para sus responsabilidades como él lo hizo. La ley está vigente.

 

Pues la ley es santa y los mandamientos son santos, justos y buenos.

 

Romanos 7:12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, y justo, y bueno. (RV)

 

Cristo dijo: Si quieres entrar en la vida guarda los mandamientos.

 

Mateo 19:17 Y él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno sino uno, es a saber, Dios: y si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. (RV)

 

Así, no se puede heredar la vida eterna a menos que se guarde los mandamientos. Aquí Dios es visto como el centro de lo más Bueno, por esto,  la palabra Dios. La ley depende en su totalidad de los dos grandes mandamientos (Mateo 22:40).

 

Mateo 22:36-40 Maestro, ¿cuál es el mandamiento grande en la ley? Y Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y de toda tu mente. Este es el primero y el grande mandamiento. Y el segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas. (RV)

 

La ley es, por lo tanto, destinada a un fin u objetivo, que está en Cristo y con el propósito de reconciliarnos con Dios. La ley, siendo espiritual, proviene de Dios y así es guardada en nuestras naturalezas a fin de reconciliarnos con Dios. La ley, entonces, no causa la muerte, si no el pecado lo hace, que es la transgresión de la ley, trabajando dentro de la persona.

 

Romanos 7:13 Entonces, ¿lo que es bueno vino a ser muerte para mí? ¡De ninguna manera! Más bien, el pecado, para mostrarse como pecado, produjo en mí la muerte por medio de lo que es bueno, a fin de que el pecado, por medio del mandamiento, llegara a ser extremadamente pecaminoso. (RV)

 

La ley es espiritual pero la humanidad es carnal, vendida al pecado.

 

Romanos 7:14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado. (RV)

 

El argumento entero que la ley no es espiritual y, por consecuencia, no es del Nuevo Testamento, es completamente falso. La persona verdaderamente convertida  se deleita en la ley de Dios en su interior.

 

Salmo 119:1 Aleph. Bienaventurados los perfectos de camino; Los que andan en la ley de Jehová. (RV)

 

Romanos 7:22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios: (RV)

 

Pues la ley conduce a los hombres a Cristo, quien es el fin de la ley.

 

Romanos 10:4 Porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree. (RV)

 

El fin de la ley aquí (telos gar nomou) es la conclusión como la meta, o el objetivo, siendo el punto, acto o estado, a donde se dirige. Esto no es la cesación de la ley.

 

Ser guiado por el espíritu libera al individuo de estar bajo la ley.

 

Gálatas 5:18 Mas si sois guiados del Espíritu, no estáis bajo la ley. (RV)

 

No porque esto suprime la ley, si no que mejor dicho permite que la ley sea guardada por un deseo interno y una acción correcta, siendo en nuestra propia naturaleza.

 

Hebreos 8:10-13 Por lo cual, este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en la mente de ellos, y sobre su corazón las escribiré; y seré a ellos por Dios y ellos me serán a mí por pueblo. Ninguno enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: "Conoce al Señor", porque todos me conocerán, desde el menor hasta el mayor de ellos, porque seré propicio a sus injusticias, y nunca más me acordaré de sus pecados ni de sus maldades. Al decir Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece está próximo a desaparecer. (RV)

 

Así, el espíritu está escrito en los corazones y en las mentes de las personas. La gente así guarda la ley a través del Espíritu Santo. La ley guardada de corazón en accionar correcto sirve entonces como la señal de los elegidos. Así otra vez, el pensamiento que no está convertido se identifica por su resistencia a la ley y por los argumentos que buscan eliminar la ley.

 

La ley de Dios es seguida por la fe y no por las obras.

 

Romanos 9:32  ¿Por qué? Porque la seguían no por fe, mas como por las obras de la ley: por lo cual tropezaron en la piedra de tropiezo, (RV)

 

Obedecer los mandamientos es un requisito previo necesario para conservar el Espíritu Santo, que mora en aquellos que guardan los mandamientos de Dios.

 

1Juan 3:24 Y el que guarda sus mandamientos, está en él, y él en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado. (RV)

 

Hechos 5:32 Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen. (RV)

 

Así, es imposible ser Cristiano y amar a Dios y a Cristo sin guardar la ley. Esto, necesariamente, implica guardar el Sábado como cuarto mandamiento.

 

Salvación por Gracia

 

La gracia de Dios se ha manifestado para la salvación de todos los hombres, entrenándonos a renunciar a toda impiedad y a todos los deseos mundanos, y a tener unas vidas sobrias, rectas, y piadosas en este mundo, mientras aguardamos la esperanza bienaventurada y la manifestación de la gloria del gran Dios y de nuestro salvador; Jesucristo (Tito 2:11-13; Ver RSV Interlinear Greek-English New Testament de Marshall). Cristo es, entonces, la manifestación de la gloria del Gran Dios que es nuestro Salvador (Tito 2:10). La gracia es, por lo tanto, un resultado de la actividad de Jesucristo.

 

La Iglesia es guardada por el poder de Dios a través de la fe para una salvación lista a ser manifestada al final de los tiempos.

 

1Pedro 1:5 Para nosotros que somos guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrimero tiempo. (RV)

 

El resultado de la fe es la salvación del alma. Los profetas profetizaron sobre la salvación, pero no conocían ni el tiempo ni la persona del Mesías cuando ellos predijeron su sufrimiento y gloria subsiguiente.

 

1Pedro 1:9-10 obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas. Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación. (RV)

 

El pecado entró en el mundo a través de Adán y reinó desde Adán hasta Moisés. La muerte era el resultado del pecado.

 

Romanos 5:12 De consiguiente, vino la reconciliación por uno, así como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así pasó a todos los hombres, pues que todos pecaron. (RV)

 

El pecado existió antes de que la ley fuera entregada a Moisés.

 

Romanos 5:13 Porque hasta la ley, el pecado estaba en el mundo; pero no se imputa pecado no habiendo ley. (RV)

 

Así, las consecuencias de la ley eran ya conocidas desde el tiempo de Adán, pues el pecado no se toma en cuenta donde no existe ninguna ley. Así, todos los hombres murieron y fueron consignados a la segunda resurrección fuera de la ley. Bajo la ley, los Patriarcas y los profetas obtuvieron la primera resurrección.

 

La gracia por consiguiente abundó debido a la redención del hombre del pecado y la ley. Donde el pecado aumentó, bajo la ley, la gracia abundó.

 

Romanos 5:15-21 Pero el don no fue como la transgresión, porque si por la transgresión de aquel uno muchos murieron, la gracia y el don de Dios abundaron para muchos por la gracia de un solo hombre, Jesucristo. Y con el don no sucede como en el caso de aquel uno que pecó, porque, ciertamente, el juicio vino a causa de un solo pecado para condenación, pero el don vino a causa de muchas transgresiones para justificación. Si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia. Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación que produce vida. Así como por la desobediencia de un hombre muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, muchos serán constituidos justos. La Ley, pues, se introdujo para que el pecado abundara; pero cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia, porque así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reinará por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro. (RV)

 

Así, la ley se introdujo para aumentar el pecado, de modo que el entendimiento de la regulación de los asuntos según el amor de Dios era obvio para aquellos que buscaban a Dios. Sin embargo, Israel no fue obediente. Por la obediencia de un hombre muchos serán convertidos en justos por la gracia, que reina por la justicia para la vida eterna en el ungido Jesús (Romanos 5:20-21).

 

No hay condena alguna para aquellos que están en Cristo.

 

Romanos 8:1 Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, mas conforme al espíritu. (RV)

 

La ley así se cumple en nosotros que caminamos conforme al Espíritu.

 

Romanos 8:4 Para que la justicia de la ley fuese cumplida en nosotros, que no andamos conforme a la carne, mas conforme al espíritu. (RV)

 

El Espíritu dirige la mente según su propósito.

 

Romanos 8:5-6 Los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espí­ritu, en las cosas del Espí­ritu. El ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espí­ritu es vida y paz. (RV)

 

La mente que es basada en la carne es hostil a Dios; no se sujeta a la ley de Dios y en efecto no puede sujetarse a la ley.

 

Romanos 8:7 Por cuanto la intención de la carne es enemistad contra Dios; porque no se sujeta a la ley de Dios, ni tampoco puede. (RV)

 

Así, la mente carnal o no convertida se identifica por su resistencia a guardar las leyes de Dios. De ahí, el argumento que la gracia ha eliminado la ley es esencialmente el de una mente no convertida. Todo el argumento de la gracia / ley identifica a aquellos que son obedientes a Dios y a aquellos que no son obedientes a Dios. La dispensa no es "si es que" si no "cómo" se guarda la ley. No deje que ningún hombre lo juzgue con respeto a su alimento y bebida, o sobre las fiestas, Lunas Nuevas o Sábados (Colosenses 2:16-17). Ellos son una sombra de lo que va a venir pero la sustancia pertenece a Cristo. Cristo así dio la ley bajo la dirección de Dios y es el mediador y el objetivo de la ley. Así, nada será eliminado de la ley hasta que todo sea llevado a cabo – a saber, la restauración del planeta a la ley y de allí a Dios al final de Milenio. Por eso, Cristo restaurará todos los Días Santos, Lunas Nuevas y Sábados a su regreso (Isaías 66:23; Zacarías 14:16-19). Si él necesita que aquellas cosas sean guardadas en el Milenio, entonces obligan a los elegidos para siempre.

 

El Espíritu de Él que levantó a Cristo de los muertos, vive en los Cristianos, dando vida por el Espíritu que mora en la persona.

 

Romanos 8:11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Cristo Jesús de los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. (RV)

 

Todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios (Romanos 8:14).

 

Romanos 8:12-14 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne: Porque si viviereis conforme a la carne, moriréis; mas si por el espíritu mortificáis las obras de la carne, viviréis. Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos de Dios. (RV)

 

y esto es por la gracia de Dios. La ley fue entregada a través de Moisés, la gracia y la verdad vinieron a través de Jesucristo.

 

Juan 1:17 Porque la ley por Moisés fue dada: pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. (RV)

 

Entonces, clamamos Abba o Padre desarrollando así el mismo estatus de hijos (Romanos 8:15) como le fue dado a nuestro hermano Jesucristo.

 

Romanos 8:15-16 Porque no habéis recibido el espíritu de servidumbre para estar otra vez en temor; mas habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos, Abba, Padre. Porque el mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios. (RV)

 

La ley por sí misma no proporciona justificación. Una persona es justificada a través de la fe en Jesucristo.

 

Gálatas 2:16 Sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para que fuésemos justificados por la fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada. (RV)

 

La vida que ellos viven es por la fe en el Hijo de Dios.

 

Gálatas 2:20-21 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y vivo, no ya yo, mas vive Cristo en mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí. No desecho la gracia de Dios: porque si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo. (RV)

 

Por la ley, morimos a la ley para que podamos vivir para Dios.

 

Gálatas 2:19 Porque yo por la ley soy muerto a la ley, para vivir a Dios. (RV)

 

Pero no anulamos la gracia de Dios guardando la ley, porque no somos justificados por la ley (Gálatas 2:21). Guardamos la ley porque el Espíritu nos dirige y la ley proviene de la propia naturaleza de Dios, que hemos puesto encima, y de la que somos participantes (2Pedro 1:4), como lo es Cristo.

 

2Pedro 1:4 4 Por las cuales nos son dadas preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas fueseis hechos participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que está en el mundo por concupiscencia. (RV)

 

Somos salvos no por la ley, pero sí por la gracia de Jesucristo.

 

Hechos 15:11 Antes por la gracia del Señor Jesús creemos que seremos salvos, como también ellos. (RV)

 

El pecado no tiene dominio alguno sobre los elegidos porque ellos no están bajo la ley, pero si bajo la gracia y son esclavos de Dios.

 

Romanos 6:14-15 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. ¿Pues qué? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo de la ley, sino bajo de la gracia? En ninguna manera. (RV)

 

Sin embargo, no pecamos transgrediendo la ley porque somos esclavos de Dios y de la justicia y no del pecado, haciéndonos obedientes de corazón al nivel de enseñanza a la cual estamos comprometidos.

 

Romanos 6:17-18 Pero gracias a Dios que, aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina que os transmitieron; y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia. (RV)

 

Considerando, antes estábamos muertos por nuestras transgresiones, somos ahora hecho vivo juntamente con Cristo por la gracia.

 

Efesios 2:5 Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo; por gracia sois salvos; (RV)

 

Hemos sido resucitados y sentados con Cristo en los lugares celestes de modo que Dios pueda mostrar, en los siglos por venir, el grado y la riqueza de Su gracia y bondad a nosotros a través de Cristo Jesús.

 

Efesios 2:6-7 Y juntamente nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los cielos con Cristo Jesús, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. (RV)

 

Porque por la gracia hemos sido salvados por la fe. Esta no es la obra de una persona, es el regalo de Dios y no debido a las obras de modo que ninguna persona pueda jactarse de ello.

 

Efesios 2:8-9 Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios: No por obras, para que nadie se gloríe. (RV)

 

Así, guardamos la ley a través del Espíritu de Dios por la gracia.

 

Obligación bajo la Ley

 

Existe, entonces, una obligación en curso para guardar la ley, la que no pasa, ni es cambiada, como lo hemos visto en (Mateo 5:18; Lucas 16:17). No fue guardada correctamente por los judíos en la época de Cristo (Juan 7:19), siendo cambiada por la tradición (Mateo 15:2-3,6; Marcos 7:3,5,8-9,13).

 

Mateo 15:2-6 ¿Por qué tus discípulos quebrantan la tradición de los ancianos?, pues no se lavan las manos cuando comen pan. Respondiendo él, les dijo: ¿Por qué también vosotros quebrantáis el mandamiento de Dios por vuestra tradición? Dios mandó diciendo: "Honra a tu padre y a tu madre", y "El que maldiga al padre o a la madre, sea condenado a muerte", pero vosotros decís: "Cualquiera que diga a su padre o a su madre: Es mi ofrenda a Dios todo aquello con que pudiera ayudarte, ya no ha de honrar a su padre o a su madre". Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición. (RV)

 

Marcos 7:3-13 (pues los fariseos y todos los judíos, aferrándose a la tradición de los ancianos, si no se lavan muchas veces las manos, no comen. Y cuando regresan de la plaza, si no se lavan, no comen. Y otras muchas cosas hay que se afierran en guardar, como los lavamientos de los vasos de beber, de los jarros, de los utensilios de metal y de las camas.) Le preguntaron, pues, los fariseos y los escribas: ¿Por qué tus discípulos no andan conforme a la tradición de los ancianos, sino que comen pan con manos impuras? Respondiendo él, les dijo: ¡Hipócritas! Bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: "Este pueblo de labios me honra, mas su corazón está lejos de mí, pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres", porque, dejando el mandamiento de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres: los lavamientos de los jarros y de los vasos de beber. Y hacéis otras muchas cosas semejantes. Les decía también: Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición, porque Moisés dijo: "Honra a tu padre y a tu madre" y "El que maldiga al padre o a la madre, muera irremisiblemente", pero vosotros decís: "Basta que diga un hombre al padre o a la madre: Es Corbán (que quiere decir: "Mi ofrenda a Dios") todo aquello con que pudiera ayudarte ", y no lo dejáis hacer más por su padre o por su madre, invalidando la palabra de Dios con vuestra tradición que habéis transmitido. Y muchas cosas hacéis semejantes a estas. (RV)

 

La ley fue cambiada a una carga o yugo por los profesores Judíos del día, haciéndole una prueba dura de Dios (ver el artículo Las Obras de la Ley o MMT [104]).

 

Hechos 15:10 Ahora pues, ¿por qué tentáis a Dios, poniendo sobre la cerviz de los discípulos yugo, que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido llevar? (RV)

 

Hay, desde arriba, una obligación continua para guardar los mandamientos de Dios. Está vigente y no pasará hasta el final de los tiempos que concierna a la existencia de los seres humano.

 

Por qué los Cristianos Guardan la Ley

 

Los Cristianos son salvados por la gracia y no por la ley. ¿Por qué entonces es axiomático que ellos reconozcan y guarden la ley? Porque la ley de Dios emana de la bondad permanente de Su Naturaleza. La ley de Dios procede de la naturaleza de Dios y, así, perdura por siempre como Dios mismo es inalterable, siendo esencialmente Bueno como el centro de la bondad última. En Marcos 10:18, Cristo dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios o Por qué usted me pregunta acerca de lo bueno. Hay uno que es bueno. Si usted quiere entrar a la vida, guarde los mandamientos (Mateo 19:17). La bondad de Dios conduce a cada uno de nosotros hacia el arrepentimiento.

 

Romanos 2:4 ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y generosidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? (RV)

 

La naturaleza de Dios es de bondad inalterable. El Ejército celeste comparte Su naturaleza. Así, ellos se vuelven constantes en la naturaleza y la bondad divina. De esta manera, Cristo es el mismo ayer, hoy y por todos los siglos  (aioonas).

 

Hebreos 13:8 Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. (RV)

 

Los elegidos, compartiendo la naturaleza divina (2Pedro 1:4), se hacen parte de un sacerdocio divino, aquel de Melquisedec que no se puede transmitir (aparabaton) o no es alterable con el tiempo (aioona).

 

Hebreos 7:24 Mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable: (RV)

 

De esta manera también, los elegidos continúan en su sacerdocio para siempre siendo rescatados como reyes y sacerdotes, y ellos reinarán en o sobre la tierra (epi) (Apo. 4). Esta es una profecía acerca del milenio.

 

Cristo es capaz de salvar en totalidad a aquellos que se acerquen a Dios a través de él (ver Hebreos 7:25, Greek-English Interlinear de Marshall). Sin embargo, él no es el objeto de adoración o el Dios que ordena por voluntad.

 

Hebreos 7:25 Por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él se allegan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos. (RV)

 

La ley de Dios debe ser seguida por fe y no por obras.

 

Romanos 9:32 ¿Por qué? Porque la seguían no por fe, mas como por las obras de la ley: por lo cual tropezaron en la piedra de tropiezo, (RV)

 

Tenemos un Nuevo Pacto donde el Señor establece Sus leyes en nuestras mentes y las escribe en nuestros corazones. Él es nuestro Dios y somos Sus siervos, adorándolo, guardando Sus leyes en nuestra propia naturaleza.

 

Hebreos 8:10-13 Por lo cual, este es el pacto que ordenaré a la casa de Israel después de aquellos días, dice el Señor: Daré mis leyes en el alma de ellos, y sobre el corazón de ellos las escribiré; Y seré a ellos por Dios, y ellos me serán a mí por pueblo: Y ninguno enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce al Señor: Porque todos me conocerán, desde el menor de ellos hasta el mayor. Porque seré propicio a sus injusticias, y de sus pecados y de sus iniquidades no me acordaré más. Al decir Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece está próximo a desaparecer. (RV)

 

Así, los signos externos no son nada. Es el guardar los mandamientos de Dios dentro de nosotros que nos circuncida (1Corintios 7:19) como Cristianos y miembros del Israel espiritual.

 

1Corintios 7:19 La circuncisión nada es, y la incircuncisión nada es; sino la observancia de los mandamientos de Dios. (RV)

 

Son aquellos que guardan los mandamientos de Dios quiénes encolerizan al dragón y son identificados en las persecuciones.

 

Apocalipsis 12:17 Entonces el dragón fue airado contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra los otros de la simiente de ella, los cuales guardan los mandamientos de Dios, y tienen el testimonio de Jesucristo. (RV)

 

Éstos son los santos quiénes guardan los mandamientos de Dios y perseveran.

 

Apocalipsis 14:12 Aquí está la paciencia de los santos; aquí están los que guardan los mandamientos de Dios, y la fe de Jesús. (RV)

 

Los santos guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. El requisito para la perseverancia proviene de los esfuerzos consecuentes para minar la intención y la fuerza de los mandamientos de Dios a través de la teología que trata atacar la soberanía del Único Dios Verdadero (Juan 17:3; 1Juan 5:20) y la integridad de Sus mandamientos. El Sábado es sólo uno de los mandamientos que son atacados para ser eliminado por el argumento de la Ley / gracia. La más extraordinaria e ilógica mala representación de la Escritura es avanzada por aquellos profesando ser Cristianos que, por su razonamiento, demuestran hostilidad hacia los mandamientos de Dios, así demostrando la base carnal de su creencia y la naturaleza no convertida de su manera de pensar. Los elegidos han sido perseguidos para no haber aceptado este falso razonamiento. Porque ellos siguen guardando los mandamientos de Dios y la fe de Jesús Su hijo, se les persigue.

 

El falso sistema del Dios Trino se establece como un precursor al error Ley / Gracia. La apostasía (apostasia) de los últimos días entre los elegidos está centrada alrededor de la ley. El hombre de pecado es realmente el hombre de la anarquía (anomias). Esto significa sin ley. Así, el hombre de la anarquía intenta eliminar la importancia de la ley. Él se pone encima de todo lo que es de Dios. Él está sentado en el naos de Dios del cual somos.

 

1Corintios 3:17 Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es (RV)

 

La palabra, traducida aquí como templo, es naos. El texto es dado por Marshall como:

 

Si alguien el lugar sagrado de [el] Dios profana, profanará este hombre [el] Dios; pues el lugar sagrado de [el] Dios santo es, quien (lo cual) son ustedes.

 

El misterio de anarquía funcionaba ya cuando Pablo escribió a los Tesalonicenses.

 

2 Tesalonicenses 2:7-10 Porque ya está obrando el misterio de iniquidad: solamente espera hasta que sea quitado de en medio el que ahora impide; [más correctamente hasta que fuera del medio esto salga (eoos ek mesou genetai)] Y entonces será manifestado aquel inicuo, al cual el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; A aquel inicuo, cuyo advenimiento es según operación de Satanás, con grande potencia, y señales, y milagros mentirosos, Y con todo engaño de iniquidad en los que perecen; por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. (RV)

 

Así, la actividad de Satanás es dirigida para establecer un sistema entre el templo de Dios para profanarlo con un sistema que procura eliminar las leyes de Dios y que engañaría aun a los mismos elegidos, si así fuera posible.  El amor de la verdad es esencial para salvar a los elegidos en este asunto.   Los elegidos tienen que luchar con mucha fuerza con esta forma de engaño durante todo el período de la Iglesia hasta la llegada del Mesías. Sólo hay un argumento que ha durado durante todo el período de la Iglesia y por el cual ha sido profanada y perseguida, y es el argumento Modalista / Trinitario o de la Divinidad Trina y el argumento de la Ley / Gracia, que inexorablemente lo sigue. El argumento fue visto en 1Juan derivándose del Modalismo como una forma Trina temprana que finalmente dio como resultado la Trinidad. Las otras consecuencias de este error fueron vistas en Colosas y Galatia así como en Efesio. El amor de la verdad es la marca de los elegidos. Aquellos, que no rechazan este argumento y no guardan los mandamientos de Dios, son rechazados por Dios. Aquel proceso es más obvio y severo en los últimos días y en las iglesias de Laodicea y Sardis. Aquellas iglesias, ambas, son rechazadas y sólo unos pocos individuos son salvos.

 

 

 

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